[Impresiones] Tegami Bachi - Época de cartas

Hace tiempo terminé la primera temporada de "Tegami Bachi", obra que me recordó la importancia de la comunicación, y de las personas encargadas de repartidla. Hace tiempo, cuando internet no poseía la implantación actual, e incluso más allá, cuando el teléfono ni existía, las cartas eran el medio de comunicación de la población. Actualmente, parece que el viejo arte de la correspondencia está desapareciendo, siendo las cartas sustituidas por nuevas formas de comunicación que eliminan a los intermediarios, facilitando la comunicación.

Al desaparecer estos, y parecer tan fácil el acceso a la información, los encargados de transportar la comunicación, o los encargados de tratarla, parecen que ya no son necesarios. Tras ver la serie, recordé la importancia que posee la comunicación en la sociedad, y el interés que existe por controlarla. La censura, la compra de medios, las líneas editoriales, etc. son aspectos presentes en nuestra sociedad, de los cuales somos conscientes, pero a los que por desgracia no estamos dando importancia, esto está produciendo un empeoramiento de la calidad de la información, de la cual todos tenemos parte de culpa, al permitir esta situación.

La necesidad de la comunicación, y el poder que otorga poseer el control es un mensaje que se encuentra en el trasfondo de "Tegami Bachi". Un tema que es presentado, pero no profundizado en esta primera temporada, no obstante, no tenemos que olvidar que la serie concluye en alza, al presentar lo que promete ser el desarrollo de una trama mucho más profunda que el resto de episodios de la serie, los cuales se muestran como pequeñas aventuras anecdotistas que nos ayudan a comprender al protagonista.

Una serie interesante, por su estética alegre y colorida para presentar un shônen, aspecto no tan habitual en este tipo de producciones. La serie posee una continuación "Tegami Bachi recerse", donde se promete ahondar en tema interesantes que se presentan en la trama, como la división extrema en clases sociales del país, el poder de la comunicación, etc.

Tendré que ver la segunda parte, para comprobar si las expectativas despertadas en esta primera temporada se cumplen, o no.

Por Iván Rodríguez